Pintar los muros de tu hogar puede convertirse en un ejercicio de decoración de interiores largo y desordenado. A menudo, el producto terminado no se ve tan bien como cuando los pintores profesionales hacen el trabajo.

Si no sabes qué color elegir para los diferentes espacios de tu casa, te recomendamos preguntar a un experto sobre las tendencias en colores para interiores de casas. Sin duda alguna, es un buen ejercicio para encontrar los tonos adecuados para nuestros muros.

Recorrimos la web para encontrar algunos consejos que ayuden a los pintores de casas aficionados a hacer el trabajo. Nosotros te ayudamos a que tus muros parezcan haber sido pintadas por el mismísimo Miguel Ángel Buonarroti.

Preparando los muros

Debes considerar tus muros como un lienzo en blanco. Esto significa que es necesario quitar todos los clavos y rellenar todos los agujeros o grietas.

Las imperfecciones deben lijarse para crear una superficie lisa y los muros deben limpiarse meticulosamente de cualquier residuo. Los muros de la cocina, en particular, deben limpiarse a fondo para eliminar cualquier residuo graso.

Una imprimación (la primera capa de pintura) no solo hace que el trabajo de pintura terminado se vea mejor, sino que también ahorra dinero porque reduce la cantidad de capas superiores necesarias.

Protección de superficies sin pintar

Es importante proteger las superficies de las gotas de pintura. La cinta se usa a menudo para proteger los marcos de ventanas de madera y los muebles; sin embargo, a menos que la cinta se aplique correctamente, la pintura puede “sangrar” cuando se quita la cinta.

Las lonas generalmente son utilizadas por los conocedores para cubrir las superficies. Si bien esto puede resultar un poco más costoso, debe recordarse que no es necesario cubrir todo el piso a la vez.

Completar el trabajo de pintura de tus muros

Aunque puede parecer una buena idea pintar todas las esquinas y otras partes complicadas de una habitación y luego volver a pintar las paredes, en realidad es mejor completar una pared entera de una vez, ya que esto permite que la pintura cepillada y enrollada se mezclen, dando un aspecto más profesional.

Siempre espera a que la capa de pintura se seque. Después, es importante considerar si tus paredes necesitan otra capa de pintura. Mucho de ese embrollo se arregla con el sellador o imprimación. ¡Tómalo en cuenta!

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