Muchos de nosotros vemos nuestras habitaciones como un paraíso de relajación. Si estás buscando un ambiente tranquilo y relajante en tu dormitorio, es una buena idea inclinarse por pintar tonos más fríos y neutros en las paredes para dormir mejor.

Seleccionar colores para pintar mi casa no es algo sencillo; no obstante, hay muchas herramientas que pueden ayudarte a que esta tarea sea más práctica. Puedes ver tendencias en Pinterest e Instagram y leer las referencias de expertos en la materia que ofrecen sus conocimientos en distintos blogs.

Prueba una de las siguientes ideas de pintura para la pared del dormitorio.

Duerme mejor con estos colores en tus paredes

Azules fríos: los tonos azules relajantes son ideales para las paredes de los dormitorios si deseas crear una atmósfera relajante y dormir mejor. Esta es probablemente la razón por la cual el azul es un color tan clásico y común.

Verdes suaves: pueden ser bastante relajantes. Los colores verdes más claros como la salvia o el apio están inspirados en la naturaleza y crean una sensación de serenidad y satisfacción.

Pasteles: los colores como el lavanda, no solo pueden ayudar a relajarte, sino que también pueden hacer que las habitaciones pequeñas se sientan más grandes y livianas.

Azules grisáceos oscuros: un color oscuro en las paredes del dormitorio puede parecer dramático y no relajante al principio, pero un azul grisáceo oscuro puede producir un efecto calmante para ayudarte a caer en un sueño profundo.

Las mejores ideas de colores para dormitorios de niños

Los colores de las paredes de los dormitorios para niños tienen la maravillosa capacidad de ser mucho más caprichosos, brillantes y juveniles que las paredes de los dormitorios principales.

Por supuesto, también hay que tener en cuenta la edad del niño y sus propios gustos antes de elegir el color perfecto para pintar el dormitorio. Piensa en seleccionar colores de pintura que ayuden a dormir mejor a tu hijo.

Piensa en los colores neutrales para que tus hijos puedan dormir mejor

Púrpuras y azules: estos colores no solo se consideran algunos de los favoritos de niños y adolescentes, sino que también se sabe que estimulan la actividad cerebral: ¡los colores perfectos para hacer la tarea!

Piensa en un tono azul cielo si buscas que tu hijo se relaje y pueda dormir mejor.

Rojos y naranjas brillantes: si bien estos colores de pintura generalmente no se encuentran en las habitaciones de los adultos, pueden funcionar bastante bien en las habitaciones de los niños y emitir un aspecto enérgico y divertido.

Neutrales: si tienes un niño quisquilloso que tiende a cambiar de opinión por capricho, siempre es una buena idea quedarse con neutrales en la pared.

Los gustos de los niños cambian mucho, especialmente a medida que crecen, por lo que pintar las paredes del dormitorio de blanco, crema, marrón claro o gris claro le permitirá a tu hijo cambiar fácilmente la colcha, los cojines y otras decoraciones a medida que pasan los años.

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